La seguridad fue mejor de lo que se esperaba en el Mundial de Sudáfrica 2010. Pero la excepción hace la regla, y en la gran final, Jimmy Jump hizo de las suyas.

Un joven catalán se metió de un salto al campo de juego del Soccer City, justo antes de que ambos planteles salieran a entonar sus correspondientes himnos.

Con una remera con la leyenda que expresa “Jimmy jump against racism” (Jimmy salta contra el racismo), atravesó la cancha directo hacia donde estaba la Copa del Mundo, sola.

Se dispuso a tocarla, pero se resbaló antes y ahí fue reducido por el personal de seguridad, prácticamente a las trompadas, cosa que no fue mostrada por las cámaras de televisión.

Jimmy es conocido por irrumpir en diferentes espectáculos, no solo deportivos. La última aparición fue en el festival de Eurovisión, durante la actuación del representante español.

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